La propietaria de Les Cols apuesta por una cocina de proximidad para emocionar al comensal
Cuando hace 27 años Fina Puigdevall planteó a su familia la posibilidad de abrir un restaurante en la casa donde había nacido y crecido les sonó “rarísimo”. De ahí que la entrada a Les Cols se haga desde entonces por la puerta de atrás de la masía, ya que no esperaban que el proyecto funcionase.
Y no fue así. Puigdevall atesora en la actualidad dos estrellas Michelin con una cocina que presume de territorio y proximidad. En sus inicios, los platos se basaban en la cocina afrancesada que había estudiado en Arnadí con Bernard Bensabat con guiños tradicionales a través de embutidos y productos de la zona.
A día de hoy, su discurso se ha “radicalizado”, según comenta a The Gourmet Journal. “No ofrecemos pescado fresco en el menú, sólo en salazón o conserva en búsqueda del producto del territorio”, explica en esta entrevista.
Les Cols (Olot) se sitúa en el corazón de Cataluña, concretamente en el Parque Natural de La Garrotxa, una comarca verde a unos 120 kilómetros de Barcelona. De ahí es de donde proceden los ingredientes del menú degustación. Una cocina de “metro 0”.
Desde la mesa del comensal es visible el gallinero y el huerto que rodea al restaurante, una obra premiada por varios galardones internacionales. “Es muy importante el entorno y lo que nos rodea. El hecho de que la persona conozca de dónde viene el plato hace que le apetezca más”, comenta la cocinera catalana.
Al frente de la sala está su marido, Manel Puigvert, que se encarga de que la experiencia esté en pleno “equilibrio entre el servicio y la cocina”.
Una experiencia única en un entorno entrañable con una cocina que desprende autenticidad, sinceridad, naturalidad y es emotiva para el comensal.
Fina Puigdevall nos habla sobre cómo empezó en el mundo gastronómico, su evolución y las tendencias que marcan su estilo de cocinar, así como el aprecio que siente por el entorno más cercano.
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