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Los cinco restaurantes más extraños

Salir de la casa o del trabajo para comer puede ser muy reconfortante. Pero comer en otro país, suena más atractivo. Y más aún, cuando el restaurante destaca no solamente por su menú sino también por su arquitectura o innovadoras ideas. Toma nota al viajar, porque los restaurantes más extraños se pueden encontrar en tu lugar de destino.

El primero de este conteo, no tiene paredes, ni ventanas, ni baños, pero sí una muy buena vista. Comer a 50 metros de altura es posible en 40 países del mundo, gracias a una idea que nació en Bélgica. Se llama Dinner in the Sky, es una mesa suspendida en el aire por una grúa. Posee asientos para 22 personas y un tiempo de 8 horas por servicio. Cuenta con músicos que también amenizarán la velada desde el aire.

Ithaa es la perla de las profundidades. Es un restaurante submarino que consta de una cúpula de vidrio de 180° grados. A 16 metros bajo el océano de las Maldivas, la vida marina es su mejor vista.

Restaurante Pomze, París

En el Dans le Noir de Barcelona, podrás comer y poner a prueba tus sentidos. En este restaurante se come a oscuras. Los camareros son unos guías invidentes y la comida debe ser descubierta primero y último por el sentido del gusto y el olfato.

La cárcel sirvió de inspiración para crear este restaurante, The Jail. Se encuentra en Taipei y las rejas son su mejor decoración. Los comensales comen en celdas y al entrar, los mesoneros vestidos de presos, toman sus huellas digitales para darle su número de prisionero. Algunos pueden ser azotados si se portan mal.

En París, Pomze no es excéntrico en su diseño, pero sí en su menú. El chef crea todos sus platos y tragos con manzanas. Aunque el restaurante no es verde, ni rojo, es blanco.

Y tú, ¿Cuál te gustaría visitar?

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