Los caprichos dulces son y serán un pecado para nuestros paladares. Toma nota de esta exquisita receta: crumble de plátano
Ideado durante la Segunda Guerra Mundial, este postre mezcla la acidez de la fruta unida con la crujiente capa externa elaborada con base de mantequilla, azúcar y harina, quedando como unas migas.
Trasladándolo a nuestros tiempos, hemos incorporado a la parte crujiente, unos dados de caramelos de leche. Estos datan de hace más de cien años donde un caramelo tostado con mantequilla, nata y azúcar blanco y moreno, daba como resultado estos dulces e irresistibles caramelos.
Ingredientes (2 cocottes)
Para la cobertura: 50 gr. de mantequilla fría / 50 gr. de harina de trigo / 50 gr. de stevia / Caramelos de Toffee / Para el relleno: 3 plátanos / 50 gr. de stevia / Piel de limón / ½ vaina de vainilla / Vino dulce
Preparación
Trocear la mantequilla bien fría en dados pequeños, mezclar con la harina y la stevia, consiguiendo como resultado unas migas dulces con bastantes grumos. Si disponemos de batidora, la mejor opción es la mariposa.
Hace un caramelo rubio con la stevia, unas gotas de agua, la piel del limón y la vaina de vainilla. Una vez haya tomado color el azúcar, incorporar el plátano previamente cortado en dados irregulares. Dejar caramelizar y añadir un chorreón de vino dulce. Reducir el propio jugo.
Disponer de dos cocottes, en el fondo colocaremos el relleno de plátano a falta de medio centímetro. Por último, añadimos el crumble y esparcimos los caramelos en pequeños trocitos para que se fundan en el horno.
Hornear a 180º durante 20-25 minutos.
¡A disfrutarlo golosos!
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