Después de dos intensos años de estudio y prácticas, 11 profesionales del sector han obtenido el Certificado Profesional de Sumiller, cuya entregra de títulos transcurrió en un emotivo acto, donde se reunieron los más importantes maestros de la enología.
En las instalaciones de CIOMIJAS tuvo lugar la entrega de diplomas de los 11 nuevos sumilleres de la mano de Mariola Ustarán, directora de la entidad gestora; José Gutiérrez, director gerente del Consorcio; Juan Miguel Rubio, presidente de la Asociación de Sumilleres de Andalucía-Málaga, y José Roldán, coordinador de la acción formativa.
Obtuvieron el Certificado Profesional de Sumiller: Iliya Georgiev Borudzhiev, José Javier Bernabé Durán, Sancho Adam André, Mª Victoria Gómez Cobos, David Benisty Saavedra, Rafael Pérez del Pulgar, José Francisco González Cerván, Pascual Benavides Mesa, José Antonio Pino Fontalba, Lorena Arquellada Jiménez y Manuel Balanzino.
Estos nuevos profesionales de la sumillería superaron con éxito dos intensas jornadas el pasado mes de junio, donde las pruebas escritas y orales-prácticas eran de gran dificultad.
Las pruebas superadas por los ahora sumilleres certificados comenzaron con una cata ciega de tres vinos: blanco, tinto y un destilado. Continuando con el examen teórico a lo largo de casi cuatro horas. Además tuvieron que desarrollar pruebas escritas como: tecnología; enología y viticultura; conocimiento de bebidas; legislación; geografía vitivinícola internacional; análisis sensorial y de la cata de vinos; destilados y licores; productos y legislación, sin que faltara la mise-en-place, preparación, del servicio del restaurante.
Posteriormente los alumnos realizaron una decantación y cata oral, para pasar a valorar si sabían vender, importante en estos tiempos, así como el conocimiento de productos, mientras que el jurado tomaba nota de la uniformidad y presentación de cada uno, junto a la carta de vinos que presentaban. Tras la comanda, tuvieron que crear un maridaje para un entrante, pescado, carne, postre frío y caliente. Todo esto tenía que estar maridado con diferentes caldos tanto nacionales como internacionales, donde los aceites, vinagres, sales, embutidos, quesos, infusiones, café, copa y puro no faltaron en las pruebas prácticas.
Una vez finalizada la entrega de diplomas, se realizó una cata vertical de Barón de Chirel, en la que participaron los sumilleres recién diplomados.