Grand Tour de Cataluña: una ruta entre paisajes y gastronomía

Una ruta de más de 2000 mil kilómetros para explorar, degustar y disfrutar de la cultura catalana

Cataluña se define por dos de los grandes pilares del turismo en su tierra: la naturaleza y la gastronomía. En esta tierra se mezclan la cultura indómita del lugar, la naturaleza heterogénea de sus diferentes espacios y una gastronomía sin complejos. Así es como nace el Grand Tour de Cataluña.

El Grand Tour de Cataluña es un itinerario circular donde todo aquel intrépido visitante que se anime a recorrerlo podrá descubrir la verdadera esencia de Cataluña. En él se conectan iconos culturales, parajes naturales y placeres enogastronómicos, mostrando al turista la verdadera definición de personalidad de una tierra como Cataluña. 

Inspirado en los grandes viajes que se iniciaron a mediados del siglo XVII, el Grand Tour de Cataluña es un recorrido de más de 2.000 kilómetros, concebido para recorrerlo en vehículo motorizado de dos maneras: en una ruta única de 13 días, conocida como la Ruta Icónica, o en 5 tramos de entre 5 y 7 etapas cada uno.

Cada tramo tiene una duración de entre 5 y 7 etapas (una etapa, un día), y se distribuyen de la siguiente manera: 

Comienzan en una ciudad grande y bien comunicada, con la intención de que cualquier visitante tenga un acceso fácil y directo a la misma. Una vez comience la ruta, esta discurrirá a través de una serie de carreteras con un alto interés paisajístico. A lo largo de cada tramo, el turista encontrará un sin fin de actividades y puntos de interés, como propuestas gastronómicas, enoturismo, miradores, fiestas y tradiciones locales, turismo activo y mucho más.

La gran versatilidad de este tour permite al visitante organizar su itinerario turístico como más lo prefiera. Y este lo hará a través de un planificador específico para esta ruta, donde podrán buscar los puntos atractivos más interesantes y programar cada parada de una manera sencilla y eficiente.

De esta manera, disfrutar de los tramos de una manera libre e intuitiva facilitará la experiencia de todo aquel viajero que venga a disfrutar de Cataluña. Sin embargo, si buscas despreocuparte por la búsqueda de experiencias de una manera total, lo único que debes hacer es contactar con algunas de las agencias de viaje afiliadas al Grand Tour de Cataluña y dejarte llevar.

¿Ruta icónica o viaje por tramos? 

La gran incógnita es, ¿realizo la ruta icónica de 13 días? ¿O disfruto cada tramo de una forma personalizada? La respuesta es sencilla: realiza el Grand Tour de Cataluña de las dos maneras. Así que olvida las prisas y céntrate en lo más importante: qué parte de Cataluña te apetece conocer antes y cómo prefieres distribuir tu tiempo.

Ruta Icónica: 13 días de recorrido

Esta ruta enlaza el arte, la historia, la gastronomía, el paisaje, la gente y las tradiciones de un territorio único, ubicado entre el Mediterráneo y los Pirineos de Cataluña. 

La Ruta Icónica abarca un total de 1496 kilómetros, divididos en 13 etapas. Estas etapas, de aproximadamente un día de duración cada una, están diseñadas para descubrir los puntos imprescindibles de toda Cataluña.

A través de ella recorrerás ciudades, pueblos, parajes naturales y atractivos turísticos tan únicos y heterogéneos como Barcelona, Montserrat, Penedès, Tarragona, Parque Natural del Delta de l’Ebre, Priorat, Monasterio de Poblet, Lleida, Parque Nacional d’Aigüestortes i Estany de Sant Maurici, el conjunto románico de la Vall de Boí, Val d’Aran, Parque Natural del Cadí-Moixeró, Teatre-Museu Dalí, Parque Natural del Cap de Creus o Girona.

Esta es una opción perfecta para aquellos que deseen ver algunos de los atractivos catalanes más representativos de la tierra, donde cultura, turismo y gastronomía se dan la mano.

Viaje por tramos: un día, una etapa

Por otro lado, encontramos el viaje por tramos. Este consiste en la misma ruta que la Icónica, pero dividida en 5 tramos para poder disfrutar más del itinerario y conocer Cataluña en profundidad.

Los tramos de Grand Tour

Tramo 1 (462km / 6 etapas).  Barcelona – Tarragona: Viñedos con sabor a mar

• Recorrido: Barcelona – Montserrat – El Penedés – Costa Barcelona y Sitges – Ruta del Císter (Monasterio de Santes Creus) – Tarragona

El Grand Tour de Cataluña comienza, como no podía ser de otra manera, en Barcelona y su legado modernista, y nos lleva hasta la Tarragona romana, tierra de calçots, cava y xató. Durante el trayecto nos adentraremos en la montaña de Montserrat, Cardona y su castillo, y el patrimonio histórico-artístico de Solsona.

También encontraremos los paisajes de viñedos y las bodegas del Penedès, el encanto de Sitges y el legado musical de Pau Casals en el Vendrell, hasta llegar a las playas del Garraf y el norte de la Costa Daurada.

Tramo 2 (418 km / 7 etapas). Tarragona – Lleida: Al encuentro de la historia

• Recorrido: Tarragona Romana – Reus – Parque Natural del Delta de l’Ebre – Bodegas modernistas – El Priorat – Ruta del Císter (Monasterio del Poblet y Vallbona de les Monges) – Lleida

Retomaremos el trayecto de nuestra ruta desde Tarragona, y nos iremos directos a conocer el modernismo de Reus para después recorrer el litoral de la Costa Daurada, donde podremos degustar la cocina marinera de Cambrils y explorar el Delta de l’Ebre en canoa o bicicleta. 

Siguiendo el curso del río Ebre entre olivos milenarios, árboles frutales y viñedos, descubriremos la naturaleza salvaje de los Ports, el arte de Picasso, los frutales del valle del Ebre, las catedrales del vino de la Terra Alta y del Priorat y los impresionantes monasterios de la Ruta del Císter, como el de Poblet, hasta llegar a Lleida.

Tramo 3 (357 km / 5 etapas). Lleida – La Seu d’Urgell: Muy cerca del cielo

• Recorrido: Lleida – Congost de Mont-Rebei – Parque Nacional d’Aigüestortes i Estany de Sant Maurici – El Románico de la Vall de Boí – Val d’Aran – La Seu d’Urgell

Desde Lleida y su icónica Seu Vella, este tramo se adentra en los Pirineos de Cataluña. La Val d’Aran, los pequeños pueblos medievales, el cielo estrellado del Montsec y el conjunto de iglesias románicas de la Vall de Boí toman el protagonismo. 

Un viaje que también incluye una visita al Parque Nacional d’Aigüestortes i Estany de Sant Maurici, y deportes de aventura en el Congost de Mont-Rebei y en el río Noguera Pallaresa, antes de llegar a la Seu d’Urgell.

Tramo 4 (357 km / 5 etapas). La Seu d’Urgell – Figueres: Oda a la naturaleza

• Recorrido: La Seu d’Urgell – Pedraforca – Pueblos pintorescos de los Pirineos de Cataluña – Zona Volcánica la Garrotxa – Besalú – Figueres

Arrancando en La Seu d’Urgell, nos dirigimos hacia el este, cruzando los Pirineos de Cataluña mientras bordea el Parque Natural del Cadí Moixeró. La ruta pasa por el monasterio de Ripoll, el Parque Natural de la Zona Volcánica de la Garrotxa y sus 40 volcanes, y por municipios emblemáticos de la zona como Santa Pau, Besalú y Banyoles. 

Este tramo culmina en Figueres, puerta de entrada al universo del genio Dalí.

Tramo 5 (525 km / 7 etapas) Figueres – Barcelona: Del surrealismo al modernismo

• Recorrido: Figueres – Parc Natural del Cap de Creus, Cadaqués i Portlligat – Pueblos medievales del interior – Girona – Vic – Parque Natural del Montseny – Costa de Barcelona: el modernismo – Barcelona

Desde Figueres, este tramo sigue navegando por el universo surrealista de Dalí visitando Cadaqués y el Cap de Creus. Continúa por la Costa Brava hasta descubrir Girona. Los pueblos medievales, como Peratallada y Rupit, ofrecen un descanso en mitad del camino antes de llegar a Vic, atravesar el Montseny y hacer una parada en las playas y en los pueblos pescadores de Costa Barcelona. 

El punto final de trayecto es el mismo desde el que comenzamos: la capital, Barcelona.

Dos maneras diferentes de vivir el Grand Tour de Cataluña, las dos igual de ricas e interesantes desde un punto de vista turístico y gastronómico. Ahora solo falta decidir lo más importante, ¿por dónde empezamos? 

Tramo 3. La verdadera Cataluña pasa Muy cerca del cielo

Si tuviéramos que destacar alguna zona o ruta del Grand Tour de Cataluña, este sería el Tramo 3. Es decir, los 357 kilómetros a lo largo de sus 5 etapas que separan Lleida de La Seu d’Urgell. Y es que Cataluña es bella por los cuatro costados, pero no existe ninguna sensación como aquella que sientes al estar “Muy cerca del cielo”.

Justamente así es como se ha bautizado a este tramo del Grand Tour de Cataluña, donde a lo largo de sus cinco etapas, el turista se va a adentrar en algunos de los lugares más altos, bellos y ricos en gastronomía de toda la comunidad.

Una catedral que observa desde las alturas, la de Lleida, será el punto de partida en un itinerario que recorrerá paisajes de vértigo donde disfrutar de algunos de los mejores cielos estrellados de Cataluña.

Nos adentraremos en el mismo corazón de los Pirineos de Cataluña, donde podremos realizar senderismo entre lagos glaciares, espectaculares cascadas y pueblos de montaña, para luego descubrir una arquitectura románica que es Patrimonio de la Humanidad y un sin fin de miradores para contemplar las mejores vistas de esta tierra.

Y desde un punto de vista gastronómico, disfrutaremos de quesos y embutidos artesanos, y de las recetas montañesas, como la típica olha aranesa, servidos junto al fuego de la chimenea, entre otras muchas cosas. ¿Comenzamos?

Cinco etapas de ensueño

Etapa 1. De los templarios de Lleida a los mejores cielos de Cataluña

Desde el punto de partida de nuestra etapa podemos vislumbrar uno de los grandes atractivos de este primer día de turismo: el campanario octogonal de 60 metros de la Seu Vella de Lleida. El día comienza con un desayuno puramente catalán, en el que no puede faltar el pa amb tomàquet, el aceite de oliva de la D.O.P. Les Garrigues, los embutidos y esas peras DOP de Lleida. Tras coger fuerzas, pasearemos por esta catedral, desde donde podremos contemplar la llanura y los cultivos de árboles frutales que se extienden a las orillas del río Segre.

Nuestro itinerario prosigue hacia el interior de la sierra del Montsec, donde encontraremos Àger y su cielo abrumador, considerado reserva Starlight. El mejor lugar para observarlo es el Parc Astronòmic del Montsec. Además, este municipio cuenta con otro espectáculo natural, el Congost de Mont-rebei.

Siguiendo el lecho del río y pasando por el estrecho del Mu en dirección a Balaguer llegaremos a Camarasa. Allí repondremos fuerzas con una coca de recapte, hecha, por supuesto, con pimientos y berenjenas de la huerta leridana. Este último municipio es conocido por su pantano, donde se pueden practicar actividades acuáticas y realizar rutas de escalada por sus escarpadas paredes.

Etapa 2. Naturaleza y cultura en la Vall de Boí

El paisaje prepirenáico fue el gran protagonista en la etapa anterior, y ahora lo abandonamos de camino a la Vall Fosca, un tesoro natural cuyo nombre hace referencia a las fuertes pendientes de las montañas, las cuales dificultan que el sol llegue al fondo del valle. 

A partir de El Pont de Suert, la carretera sube cada vez más por las montañas hasta llegar a los pueblos de la Vall de Boí. Este valle acoge ocho iglesias y una ermita románicas de los siglos XI y XII, declaradas Patrimonio Mundial por la UNESCO. El Centre del Romànic de la Vall de Boí organiza visitas guiadas para sumergirse en su historia. 

Además, la propia Vall de Boí es una zona ideal para practicar deportes de invierno y de aventura y para probar embutidos artesanos como el xolís. Y para reponer fueras, que mejor forma de hacerlo que probado la carne de sus vacas brunas y ecológicas. Esta ganadería sostenible basa su producción de un sistema de cría y engorde natural, con el cual los animales se alimentan de la hierba fresca de los pastos de alta montaña.

Por último, llegamos al Parque Nacional de Aigüestortes i Estany de Sant Maurici, el único parque nacional de Cataluña y reserva Starlight por la UNESCO. Cuenta con más de 200 lagos de origen glaciar rodeados de picos que rondan los 3.000 metros de altura.

Etapa 3. Val d’Aran: cascadas y fauna singulares

La historia de la Val d’Aran es fundamental si tenemos en cuenta su particular localización geográfica y su orografía. Este territorio escondido en mitad de los Pirineos de Cataluña tiene algunas peculiaridades que seguro encantarán al visitante. Como por ejemplo, este valle cuenta con una lengua propia, el aranés. Pero no solo esto, sino que cuenta con unas costumbres ligadas a una tierra que durante mucho tiempo estuvo aislada. 

En la capital, Vielha, se podrá disfrutar de la iglesia de Sant Miquèu, construida durante diferentes épocas y donde se mezclan románico y gótico. 

Siguiendo el curso del río Garona, combinaremos el senderismo con la visita a alguna de las numerosas cascadas que se encuentran repartidas por el territorio. 

También se pueden observar animales en semilibertad, como el lobo o la nutria, en el parque de fauna salvaje Aran Park de Bossòst. 

Y el punto gastronómico nos lo dará la  aranesa, una sopa típica muy nutritiva de alta montaña que debemos probar antes de abandonar el valle.

Etapa 4. En ruta por los lagos glaciales y relax termal de altura

Casas de piedra y tejados de pizarra de la Val d’Aran. Así es como comienza un nuevo día en una nueva etapa del tramo tres del Grand Tour de Cataluña.  Entre ellas, encontrarás pequeños tesoros, como la quesería más alta de los Pirineos en Bagergue, a 1.419 metros de altitud, o iglesias románicas del s.XII como la de Santa Maria, en Arties. 

En Salardú, en el interior de la iglesia de Sant Andrèu, descubriremos la talla del Crist de Salardú, una de las más valiosas del románico aranés, creada en el siglo XII. 

Además, para aquellos eco-deportistas, algunos tramos de esta etapa del recorrido por la Val d’Aran se puede hacer en una e-BTT, una bicicleta eléctrica de montaña. Por ejemplo, el tramo entre Arties y Salardú ofrece unas vistas espectaculares del pico del Montardo. 

Además, después del trabajo bien hecho, se puede tomar un relajante baño en aguas sulfurosas en los Banhs de Tredòs, el establecimiento termal más alto de Europa.

Etapa 5. Rafting, pastores y vida rural en los Pirineos

Comenzando en el Pallars Sobirà,  además de ser un área muy reconocida por ser tierra de pastores de ovejas, tanto que cuenta con su propio Ecomuseo de pastores de la Vall d’Ássua, descubrimos los espectaculares paisajes del Parque Natural del Alt Pirineu. En él, podemos disfrutar de este tramo de la etapa mediante una ruta a caballo, en BTT, a pie o practicando deportes de aventura. Además, no está demás probar alguno de sus famosos quesos, como el famoso Tros de Sort o  Casa Mateu a Surp.

Siguiendo la etapa llegamos a Sort,  donde nos encontramos con un destino de turismo deportivo con infraestructuras y servicios para hacer fácil la estancia del deportista. Junto con Sort, Llavorsí, Rialp, Esterri d’Àneu y la Ribera de Cardós son las capitales catalanas del rafting que se practica en la Noguera Pallaresa, uno de los mejores ríos de aguas bravas de Europa. 

Después de habernos divertido bajando los rápidos, ponemos rumbo hacia el Ecomuseu de les Valls d’Àneu, donde nos mostrarán cómo vivían las familias y cómo eran las casas de los Pirineos de Cataluña durante la primera mitad del siglo XX.

Por último, y para cerrar el tramo tres, terminaremos en La Seu d’Urgell. Este municipio ofrece infinidad de rutas verdes y atractivos como la catedral de Santa Maria. Y será indispensable probar su queso, el único con DOP de Cataluña, y visitar la Feria de Quesos Artesanos del Pirineo Catalán.

Otro punto a tener muy en cuenta en este Tramo 3 del Grand Tour de Cataluña es que, gracias a la facilidad de programación del planificador de ruta, el visitante podrá organizar y reservar las experiencias turísticas que más les interesen, entre las que encontramos las experiencias activo-naturales, las culturales, las enogastronómicas y las sostenibles-regenerativas. 

Sin embargo, si cabe destacar una de estas cuatro categorías, esta sería la enogastronómica. Y es que Cataluña es una tierra donde el vino y la comida tienen un sello propio, una calidad inherente que los posiciona como uno de los grandes atractivos de este Grand Tour de Cataluña. 

Porque ¿qué sería de una etapa sin experiencias enogastronómicas? Algunas de las más destacadas y que se pueden llevar a cabo a lo largo del tramo número tres son la degustación de mieles y de otros productos locales realizando apicultura en Mont-Rebei; también podrás poner a pruebas tus sentidos visitando la bodega Castell d’Encús; o incluso conocer la ratafía, es decir, la elaboración de este licor dulce, elaborado a partir de la maceración de distintos frutos, visitando la antigua fábrica de Licores Portet. 

Además, los productos de la gastronomía catalana estarán muy presentes durante todo el tramo. Como por ejemplo en Lleida, donde cabe destacar el AOVE D.O.P. de Les Garrigues o sus embutidos, frutas y verduras; la gastronomía pirenaica de la Vall de Boí donde probar setas, quesos de pastor y una carne cocinada a la llosa; también son muy típicos el Xolís, un embutido elaborado con carne magra de cerdo: jamón, lomo y mezcla de papada y tocino fresco; la girella, que se hace con carne de cordero; la “secallona”, similar al fuet pero más fino; o la olha aranesa, una contundente y sabrosa sopa típica de la gastronomía del valle; o los quesos artesano de las montañas, incluida la DOP de La Seu d’Urgell, donde se acoge la Feria de Quesos Artesanales del Pirineo, la Feria de Sant Ermegol, que celebra su 28ª edición.

Por último, en toda ruta por carretera se necesita una serie de “herramientas” para hacer que nuestro viaje sea lo más cómodo y divertido posible. Por eso, se ha creado un planificador, ya mencionado, y una playlist en Spotify para poder ir escuchando la mejor música y mimetizarte con el entorno, sacándole aún más partido a tu recorrido.

En definitiva, el Grand Tour de Cataluña es una ruta flexible y versátil que permite descubrir la esencia de Cataluña con un itinerario circular de más de 2.000 kilómetros. En ella se conectan iconos culturales, parajes naturales y placeres enogastronómicos, siempre de una manera sostenible y responsable, buscando el Slow Tourism. 

En otras palabras, el Grand Tour de Cataluña busca el disfrute del visitante desde un punto de vista sosegado, sin prisas, transcurriendo por carreteras paisajísticas de gran belleza y descubriendo los mil y un atractivos patrimoniales, culturales, naturales y gastronómicos de una tierra tan única como lo es Cataluña.