Una dulce versión de la popular receta francesa
El suflé, souflé o soufflé, que significa soplado o hinchado, es una elaboración, ligera y llena de aire en el interior. Aunque puede ser dulce o salado, la base es la misma, realizada con claras de huevo batidas para que, una vez en el horno, se infle por encima de su recipiente.
Podrás encontrar desde soufflés de chocolate, pistacho o avellana a otros salados, como el popular soufflé de queso, espinacas o bacon. La creación de los soufflés se le atribuye a Antoine Beauvilliers, excocinero de Luis XIV, que los servía en su propio establecimiento, Le Beauvulliers, en 1782.
Reinterpretamos esta receta popular y te proponemos darle una vuelta en versión dulce. En la base, un mousse de chocolate con leche, previamente congelado, que se termina con un merengue suizo. Eso sí, antes de degustarlo, no olvides quemar el merengue por encima.
Ingredientes para seis unidades
- 340 g de chocolate fondant con leche
- 500 ml de nata líquida para montar (300 de ellos bien fríos)
- 2 huevos L
- 4 yemas de huevos L
- 65 g de azúcar
- 1/4 cucharadita de extracto de vainilla
- 100 g de clara de huevo
- 150 g de azúcar
Elaboración paso a paso
- Preparar seis recipientes (ramekines) colocando un cilindro de acetato en el interior de cada uno. Cerrar con papel celo.
Para el soufflé de chocolate
- En un recipiente apto para microondas, poner el chocolate troceado. Introducir en el microondas y dar tres golpes de calor de 20 segundos, removiendo entre cada uno.
- Llevar a ebullición 200 ml de la nata líquida y verter sobre el chocolate. Dejar reposar 5 minutos.
- Remover cuidadosamente con unas varillas hasta obtener una crema homogénea y brillante. Atemperar.
- Preparar un baño maría calentando agua en un cazo y colocando encima un bol en que introducir los huevos, las yemas, el azúcar y el extracto de vainilla.
- Batir con unas varillas durante 8-10 minutos o hasta que blanquee y se vea esponjoso.
- Retirar del calor y continuar batiendo hasta que se enfríe ligeramente.
- Montar la nata restante, bien fría, a velocidad alta hasta que haga picos suaves.
- Mezclar la crema de huevo con la de chocolate.
- Incorporar la nata montada y remover con suavidad hasta obtener una mezcla homogénea.
- Distribuir la mezcla en los ramekines, dejando que sobresalga un dedo por encima del borde. Golpear los ramekines ligeramente sobre la mesa para quitar burbujas de aire e introducir en el congelador durante un par de horas o hasta que adquiera algo de consistencia.
Para el merengue suizo
- Preparar un baño maría calentando agua en un cazo y colocando encima un bol en que introducir la clara de huevo y el azúcar.
- Remover con una varilla y calentar la mezcla hasta alcanzar los 58-60ºC.
- Retirar del fuego, añadir unas gotas de zumo de limón y batir con unas varillas eléctricas a velocidad media hasta que las claras empiecen a montar. Subir entonces la velocidad de las varillas y batir hasta que el merengue se enfríe por completo y esté firme y brillante.
- Extender una capa de un centímetro sobre cada soufflé de chocolate y alisar.
- Introducir de nuevo en el congelador un par de horas más o hasta el momento de consumir.
- Retirar los acetatos, dorar la superficie con un soplete y servir.
‘Armonías en Sabores y Fragancias’. Por Juan Muñoz Ramos.
Soufflé, chocolate helado y crema gratinada, qué maravilla de receta y de postre e incluso de merienda para las tardes soleadas.
Hablamos de sabores intensos, fríos y cálidos a la vez, un contraste que hemos de mantener en la boca, unas fragancias y unos sabores que nos van a marcar bastante tiempo. Para conseguir esta permanencia en equilibrio, vamos a disponer del agua más indicada para estos platos, hablamos de frescura, sapidez y cremosidad.
Hablamos de S.Pellegrino, ya saben, así no fallamos nunca. A su lado, seguimos con otras burbujas, las que nos aporta este fantástico cava rosado de Pinot Noir Reserva de Juvé & Camps, un cava frutal, fresco, alegre y desenfadado, porque así hemos de tomar la vida con alegría, salud y actitud positiva. Y para esto existe el mundo de la gastronomía, donde hay que saber elegir sus complementos perfectos.
Pero si nos apetece una versión sin alcohol, para nuestros hijos o para quien no quiera alcohol, acompañaremos este chocolate caliente con crema gratinada con Essenza naranja dulce y frambuesa negra, todo un festival de sabores, porque nuestros hijos también deben de participar de la gastronomía y de todas las fragancias y sabores que nos ofrece.
Trucos
- La crema de huevo se denomina sabayón. Estará listo cuando las varillas dejen surcos en él.
- Para que la nata monte, tiene que estar bien fría. Se puede meter en el congelador 10-15 minutos antes de empezar a batir.
- Para comprobar que el merengue está listo, hay que dar la vuelta al recipiente donde lo estemos batiendo.
Y no te pierdas la QUICHE DE PUERRO Y BEICON, aquí puedes encontrar la receta paso a paso.
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Nos ha encantado tanto el blog como la receta.