Tahini, la pasta de sésamo

Compartir


Ingrediente indispensable en el hummus, posee numerosas propiedades nutritivas

 El tahini, o pasta de sésamo, ha ganado mucha popularidad en los últimos años, pero realmente es un alimento con una larga historia. Su origen se encuentra en la India sobre el año 5.000 a.C. y ha sido un ingrediente muy importante en las cocinas africanas, asiáticas y de Oriente Medio.

El sésamo servía como medicina en varias civilizaciones del pasado, como la griega y la india, donde se consumía por sus propiedades nutritivas. Hoy en día, se sigue consumiendo en muchas partes del mundo, ya que también es un ingrediente indispensable en platos como el hummus o la halva, un dulce similar a los mantecados pero elaborado con pasta de sésamo.

El sésamo y los beneficios para la salud

Las semillas de sésamo son un producto muy sano, ya que proporcionan nutrientes esenciales para el funcionamiento del cuerpo. Para empezar, destacan los altos niveles de fibra y proteína: 3,5 gramos de fibra y 5 gramos de proteína por cada 30 gramos de sésamo.

Estas semillas también tienen concentraciones altas de vitaminas B6 y E, además de magnesio, hierro, cobre y zinc. También tienen muchos antioxidantes y propiedades que pueden ayudar a disminuir la inflamación en el cuerpo, algo que contibuye a mantener un fuerte sistema inmune.

Usos del tahini

El tahini se puede utilizar de muchas maneras, tanto en platos dulces como salados, y tiene mucha importancia para una gran variedad de cocinas. Como ya se ha mencionado, uno de sus usos más comunes es en la elaboración del humus, que se hace a base de tahini y garbanzos. Asimismo, el baba ghanoush, un puré de berenjena típico de la cocina árabe y mediterránea, lleva un toque de tahini.

También se puede hacer una gran variedad de salsas y aderezos para ensaladas utilizando el tahini, o se puede usar para sustituir la crema de cacahuetes (peanut butter) en una receta. En cuanto a platos dulces, el tahini combina muy bien con el chocolate o sabores de Oriente Medio, como el agua de rosas o los dátiles. Si quieres preparar un batido proteico, añade una cucharada de tahini a un batido de frutas.

Cómo hacer tahini casero

Cada vez es más común conseguir el tahini en el supermercado o un herbolario, pero también se puede hacer en casa con mucha facilidad. Para hacer tahini casero, solo necesitas semillas de sésamo tostado, un poco de aceite y sal.

En una batidora, tritura 100 gramos de sésamo tostado, una cucharadita de sal y un chorreón de aceite neutro (aceite de girasol, aceite de coco…). Tritura y añade el aceite, poco a poco, hasta conseguir la textura deseada. El tahini debe ser suave y cremoso sin la presencia de semillas enteras.

Además de ser muy sano, el tahini es un alimento que tiene una gran versatilidad en la cocina. Es tan sencillo de hacer que incluirlo en la dieta cotidiana resulta muy fácil.

No te pierdas el pan elaborado con masa madre, un complemento perfecto al tahini.

Síguenos en TwitterFacebookInstagram o recibe nuestras noticias pinchando aquí.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Close
The Gourmet Journal © Copyright 2022. Todos los derechos reservados.
Close

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies