Albóndigas de Espinaca

Tradicionales o novedosas, las albóndigas esconden un sinfín de recetas dependiendo del país donde se preparen, de Italia a Suecia, son un manjar

Las albóndigas son una de las elaboraciones más populares del recetario internacional. Aunque todas parten de una mezcla de carne de cerdo o ternera, también hay de pollo o de otras aves. Cada casa tiene su receta.

Las albóndigas suecas suelen ser más pequeñas y se acompañan de puré de patatas y salsa de frutas ácidas. En cambio, las albóndigas italianas se sirven, como no puede ser de otra manera, con pasta. Desde unos pappardelle o fusilli, hasta spaghettis con una salsa de tomate espesa.

En Francia, a las albóndigas se les conoce como boulettes de viande o fricadelles, y pueden ser de carne de cerdo, ternera o pescado. Aunque si nos damos un paseo por el mundo, estas bolas de carne o pescado reciben muchos nombres. En Suecia, köttbullar; cabeza de león en China, aunque estas son algo más grande que las habituales; o keftedes en Grecia.

Más allá de las recetas clásicas, reinterpretamos los sabores de siempre con unas albóndigas con hojas de espinaca fresca y ricotta, donde en su elaboración se suele emplear leche de búfala, al igual que la Mozzarella di Búfala de Campana que cuenta con Denominación de Origen. En España, por ejemplo, recibe el nombre de requesón y, normalmente, se elabora con leche de vaca, oveja o cabra.

Date una vuelta por el mercado, busca una hojas verdes de espinaca, descorcha una botella de vino y prepara una refrescante agua con gas S.Pellegrino. ¡Buen provecho!

Albóndigas de Espinaca

Manu Balanzino

Tradicionales o novedosas, las albóndigas esconden un sinfín de recetas dependiendo del país donde se preparen, de Italia a Suecia, son un manjar

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Tiempo de preparación 40 minutos min

Tiempo de cocción 30 minutos min

Cocina Mediterránea

Raciones 4 personas

Ingredientes

  

• 350 g de espinacas cocidas
• 250 g de queso ricotta
• 1 huevo
• 25 g de harina
• 50 g de queso parmesano
• Nuez moscada
• Pimienta negra
• Sal
• 1 lata de tomate troceado *Para la sala de tomate especiada
• Guindilla seca *Para la sala de tomate especiada
• 2 dientes de ajo *Para la sala de tomate especiada
• Aceite de oliva virgen extra *Para la sala de tomate especiada
• Laurel *Para la sala de tomate especiada
• Pimienta negra *Para la sala de tomate especiada
• Azúcar moreno *Para la sala de tomate especiada
• Sal *Para la sala de tomate especiada

Elaboración paso a paso

 

• En un bol, disponer las espinacas cocidas muy bien escurridas.
• Añadir la ricotta, el huevo, la harina previamente tamizada para evitar grumos y el queso parmesano rallado.
• Incorporar nuez moscada molida, pimienta negra y sal. Mezclar todo y hacer pequeñas albondigas. Reservar.
• En una sartén, añadir un chorreón de aceite de oliva virgen extra, la guindilla y los ajos laminados.
• Una vez que los ajos estén dorados, sin llegar a quemarse, añadir el tomate troceado y la hoja de laurel.
• Terminar con la pimienta negra recién molida, el azúcar moreno para quitar la acidez del tomate y sal.
• A fuego lento, dejar reducir la salsa y, a media cocción, añadir las albóndigas.
• Cocer unos minutos y servir.

Trucos

• A la hora de cocer las espinacas, puedes comprar las hojas frescas y hervirlas en agua. Otra opción es calentar una olla, añadir las espinacas y, sin agua, dejarlas que se cuezan en su propio líquido. Esto te llevará pocos minutos.
• Recuerda siempre escurrirlas muy bien para quitar todo el exceso de agua.
• Si te gustan las acelgas, también puedes emplearlas a la hora de hacer las albóndigas. Para ello, utiliza las hojas verdes y reserva los tallos para otra elaboración debido a que son algo más duros.

‘Armonías en Sabores y Fragancias’. Por Juan Muñoz Ramos.

El queso y la larga crianza de este Brut Nature Leopardi, un Corpinnat de Macabeo, Xarello y Parellada con más de 60 meses de crianza en botella con sus lías, son los dos elementos para que la espinaca y el tomate se conviertan en una textura suave e integrada.

¿Y el agua? En este caso, tomaremos un agua con un gas fino, delicado y con un punto de sapidez que aporta alegría y frescura a este plato. Hablamos de S.Pellegrino, un agua con un pH de más de 7.6. Esto quiere decir “agua alcalina”, muy baja en sodio y que es ideal para una dieta equilibrada.
El plato es realmente sabroso, integrando espinacas, queso, tomate y cilantro, todo natural, mediterráneo, con mucho sabor y equilibrio.

S.Pellegrino y Leopardi forman un dúo donde es difícil competir con ellos, y es que a veces la suma de factores, como en este caso son las burbujas, suman y ensalzan al plato aportando una textura untuosa con sabor.

Pero, ¿cómo se podría definir el gusto? El gusto es la interpretación libre que hace nuestro cerebro a partir de colores, aromas, sabores y texturas, eso es el gusto.

Cómo servir las Albóndigas de Espinaca

Las albóndigas de espinaca es un plato fácil de hacer y muy sabroso. El toque dulce de la salsa de tomate unido con las hojas verdes de espinaca, junto con el queso, sorprende mucho. Además, puedes elaborarlas con anterioridad y, en el último minuto, calentar la salsa e incorporar las bolas de carne.

Acompáñalas, para empezar el festín, con un hummus de aguacate y, de postre, crepes caramelizadas de manzana.

Receta paso a paso: FALAFEL DE ZANAHORIA